En esta obra se pidió desde el comienzo una vivienda con reminiscencias árabes, pero para un estilo de vida occidental.
El solar, en esquina, presentaba una posibilidad deseada en todo diseño, tres caras libres.
Algunos detalles, se debieron resolver teniendo en cuenta el presupuesto de los propietarios. Por ejemplo las bóvedas que se podrían haber resuelto transparentes. La vivienda consta de un dormitorio en suite en planta alta, y cocina comedor, estar, aseo y cochera en planta baja.
La obra de arquitectura paisajista, se diseñó, y fue resuelta buscando elementos vegetales que respondieran al efecto árabe, pero en un clima totalmente diferente con inviernos de temperaturas bajo cero.