La naturaleza es infinita. Y la complejidad que presenta, aunque resulte armoniosa y ordenada, es una suma de crecimiento vida y muerte de cada elemento integrador. Todo lo que nos rodea sufre un proceso de auto – organización, fortuito, a semejanza, no – lineal, con un grado variable de indeterminismo y no previsible.
El resultado si releváramos las especies participantes en cada imagen, es una respuesta compleja.