Los problemas de emancipación de jóvenes, en España, aún los que tienen trabajo, resultan difíciles, dado que el alquiler, en general es una fracción importante de su sueldo. Y si pensamos en la posibilidad de invertir para poder tener una vivienda,es casi imposible. Los créditos escasos, en muchos casos, y por el otro lado, las viviendas o son muy grandes, con un costo inaccesible, o viviendas pequeñas con poca oferta en el mercado.
Generalmente se encuentran viviendas a partir de 2 dormitorios. El valor difiere muy poco con respecto a la de tres dormitorios.
Si vemos en la red los resultados de una búsqueda rápida, llegaremos a la conclusión que los jóvenes tienen dificultades para encontrar viviendas que se ajusten a su bolsillo, y a su necesidad de espacio actual.
En otros países, se ha comenzado una moda de mini-casas. O bien son prefabricadas, o bien del tipo móviles, con lo cual su valor es relativo. Siempre pensando que un joven pueda hoy encontrar una solución a vivir solo, que sea acequible, y que esa propiedad pueda venderse o alquilarse, en un futuro, cuando cambie la composición familiar de ese/a joven.
Hay ejemplos que pueden ofrecer alternativas.
Habrá que analizar las necesidades básicas, porque una mínima superficie, requiere un orden y un almacenamiento, con mayor precisión,que tienen que ubicarse desde el primer boceto en un lugar concreto. Si esto no se logra, el espacio resultante resultará poco placentero. Y al final terminará expulsando a su propietario.
Es muy importante que ese usuario, se interiorice de la situación de su vivienda, entendiendo que es un espacio con las funciones básicas, en lugares precisos. Y que el espacio libre tiene que lograr que la experiencia habitable a largo plazo sea cómoda.
Por tanto debe contar con un baño completo, una cocina compacta y funcional y luego un área libre que cumplirá las funciones de ocio, descanso y trabajo si se requiriera.
El lugar de descanso/dormitorio, generalmente se sitúa en zonas estancas, o en muebles que se pliegan.
Los muebles de almacenamiento, y los de la cocina, se ubican en el perímetro, y debajo de las escaleras, (cuando lo permitan) y son elementos que deben reunir la máxima flexibilidad. Dado que deberán servir para ropa, libros, electrónica, etc.
Los colores a utilizar serán dentro de la gama de blancos, tiza o claros, para lograr que el espacio sea acogedor
Estos ejemplos demuestran que se puede vivir en un mini espacio, y tener intimidad.